20 octubre 2005

Antinatural

Cuán caprichoso es ese momento en el que alguien decide introducir en una conversación la palabra "antinatural". En la era de las cócleas artificiales, de los cambios de sexo, los implantes de silicona y las inyecciones de botox, los antihistamínicos, las operaciones de miopía con láser, los inhibidores del crecimiento del vello corporal, los autobronceadores, el viagra, las redes de arrastre, los anticelulíticos, los pollos hormonados y las mil y una operaciones de Michael Jackson, alguien encuentra de repente algo que le parece antinatural.

Sonará extraño lo que digo, pero sólo teneis que fijaros con atención y pronto encontrareis alguna conversación en la que alguien os soltará un "a mi eso no me gusta porque me parece antinatural".


Pondré un sencillo y muy típico ejemplo: ¿Cuánta gente hay que defiende que la homosexualidad es mala porque es "antinatural"?(¿Y cómo es que nadie les ha explicado que sí se dan otros casos de relaciones homosexuales en la naturaleza, y que es mucho más "antinatural", por ejemplo, la monogamia en seres humanos?). Pero como esto es una bobada que sueltan cuatro homófobos de mierda cuando no saben qué decir, pondré un ejemplo que a mí me resulta mucho más curioso.

Ponte en la situación de que estás hablando con un grupo de chicas de la famosa píldora que hace que te venga la regla una vez cada seis meses. Sí, todos hemos oido hablar de ella alguna vez, y es una de esas cosas misteriosas que la gente dice durante años que "saldrá el año que viene". Bien, pues es muy probable que en esa conversación, una de esas chicas, si no varias, te diga "ay, a mí eso no me gusta porque me parece antinatural". Y yo me pregunto, ¿y no es antinatural esa otra píldora que te tomas cada noche para no quedarte embarazada(sólo tienes que informarte de cómo funciona, es asombroso)?¿No es antinatural que desnaturalices tus proteinas capilares para estar más guapa (que te alises el pelo)?¿No son antinaturales los implantes de silicona en el pecho?¿No es antinatural consumir pastillas adelgazantes? Sí, todo esto es antinatural, pero es que la palabra "natural" no tiene cabida en este mundo de Nintendogs. Lo que es antinatural es uno de esos múltiples lavados de cerebro que todos sufrimos: el de que las mujeres tienen que tener la regla porque si no, me imagino yo, serán menos mujeres.

Otro ejemplo de cosas paradógicamente antinaturales, es la de que no debes estirilizar a tu animal de compañía porque es antinatural. Ay, como me enerva. A ver, o sea, que el hecho de que un perro (o un gato, lo que sea) viva en un piso en pleno centro, tenga que defecar automáticamente a las mismas tres horas cada día, coma alimentos ricos en fibra y lleve chuvasquero, eso sí es natural. Pero estirilizarlos es antinatural. Es muy antinatural, sí que lo es, pero matar a sus crías a sangre fría, abandonarlas en un contenedor o regalárselas a cualquier desamprensivo es anti sentido común, anti humano y anti todo. Y todo esto sin mencionar a todos los cacho cabrones que creen que tener un perro atado a una cadena toda su vida, matar conejos a balazos, pinchar un toro hasta la muerte o despellejar vivo a un zorro para hacerse una estola es mucho más natural que estirizar a un gato.

Si hay algo antinatural en este planeta es la bajeza, la crueldad y lo retorcido de la mentalidad del ser humano.

Natural natural ya sólo quedan la miel y las tallas 85 de sujetador. Todo lo demás ten por seguro que hace años que está manipulado, trastocado y, probablemente, sustituido por un sucedáneo de peor calidad.

Flemas y otros fluidos.

No hay nada, nada, nada en el mundo que me dé tanto asco como un vómito. Todo lo que tiene que ver con vomitar me pone los pelos como escarpias: las nauseas, las arcadas, la bilis... todo me recuerda inevitablemente al vómito y me pongo de color verde. Puedo hablar de un montón de temas escatológicos, incluso mientras estoy comiendo, tales como la coprofagia, la lluvia dorada, los dilatadores anales, la sangre coagulada... no me afectan. Pero el vómito, ay, el vómito. Incluso el mío me da asco. Y todo desde que vi un vídeo de esos que circulan por internet de una oriental haciendo una especie de rito antinatural que consistía en devolver en una ensaladera y otras cosas que no os cuento porque os aprecio.

Pero, al menos, el que vomita es porque lo necesita. Puede que le haya sentado mal la cena. Quizás juró que podría beber seis chupitos de tequila del tirón sin doblar. Incluso es posible que tenga un trastorno alimentario. Pero el que vomita lo hace por algún motivo.

Lo que no tiene excusa alguna es la segunda cosa que más asco me da: los escupitajos. Porque, a ver, ese chico de veinte años, recién sacado de la adolescencia, con todos los órganos de su cuerpo en perfecto estado de salud, por qué demonios necesita escupir. Por qué nos regala ese escupitajillo compacto y blancuzco que impulsa con la lengua y vuela en parábola hasta aterrizar en la calle (que es de todos). Pero si ya fuma y probablemente se droga, ¿también necesita escupir para ser un chulito?. Hay estudios que han demostrado que pasar horas, días e incluso semanas sin escupir no es perjudicial para la salud. No hay ningún motivo para desechar la saliva que tenemos en la boca, se renueva ella sola.

Pero si hay algo peor que el flipado de 20 años que escupe porque sí, es el viejo flemoso que escupe porque sí. Ese viejo que cuando va a escupir te avisa con medio minuto de insufribles carraspeos que revuelven sus flemas guturales para que salgan mejor. Vas caminando tranquilamente por la calle y de repente oyes el rugir de la garganta de un viejo que va detrás, se te erizan los pelos de la espalda y piensas "que no escupa eso, que no escupa eso..."¿Pero por qué es ese viejo la persona con más flemas de la tierra? ¿Pero qué se toma ese hombre todas las mañanas, una taza de ácaros?¿Es que se bebe un litro de Flumil cada cinco minutos para estar más suelto? ¿Acaso es normal espectorar así?¿Cómo te entrenas, viejo flemoso, cómo coño lo haces?

El viejo flemoso suelta un escupitajo que es como un lago de babas y moco. Uno puede saber el estado de salud del viejo flemoso sólo viendo ese lapo. Hay calles de la ciudad en las que vas esquivando esputos, buscando el centímetro cuadrado de acera que aún está limpio. No lo entiendo, no me cabe en la cabeza que sólo ese tipo de personas necesiten escupir con tanta frecuencia y en esas cantidades.

Me parece totalmente incívica esta actitud. Es una falta de respeto a lo demás, por el asco que les da y por lo sucio que resulta tener las calles adornadas con sus regalitos. Con lo mal que le parece a la gente que no se recojan las cacas de perros. ¡Los escupitajos son muchos más nauseabundos!

Sólo quiero desearle, por último, a cada uno de los viejos flemosos del país, que cuando vuelvan a su casa se resbalen en plena calle y se caigan de bruces con la cara pegada al inmenso y asqueroso lago de mocos que soltaron dos horas atrás.

19 octubre 2005

Feminista, sí, feminista.

Leí hace algunas semanas, en una sección de humor de algún periódico gratuito de los que reparten en la ciudad de La Coruña, un artículo que se llamaba "frases estúpidas que decimos sin saber por qué". Entre todas ellas, estaba la mítica y consabida "Y no es que yo sea racista...", que todos soltamos justo antes de un enorme y esplendoroso comentario mega racista (p.e. "Y no es que yo sea racista, pero yo no quiero un gitano a menos de cinco metros de mí "). Pues tan cierto como esto es que, cuando una chica te espeta un "Y no es que yo sea feminista...", a continuación, con un 99% de probabilidad, te soltará una perla feminista. Lo que yo no entiendo y no me cabe en la cabeza es por qué leches se excusa una mujer por ser feminista, cuando la Real Academia Española, que ya sabemos que para estas cosas es como un dios todopoderoso, define, textualmente, feminismo como :
Movimiento que exige para las mujeres iguales derechos que para los hombres.
No veo yo qué tiene eso de malo. Me lo expliquen.

Cuando una chica que se gana la vida como cantante y afirma que sus influencias musicales más importantes
son David Bisbal y Jennifer Lopez (basado en un hecho real), suelta un "Y no es que yo sea feminista...", ignorando, o eso espero, el significado real de la palabra, la verdad es que no te asustas demasiado. Lo grave es cuando una escritora enorme como es Carmen Posadas, que es una mujer importantísima y cultísima (y otros muchos superlativos), escribe en El Semanal un artículo que se titula "¿Y de novios, qué?", y lo comienza excusándose con:
Me gustaría aclarar desde el principio que no soy feminista al uso.
Y lo pone en negrita y todo. Hala. Bien, quizás ese "al uso" le añade un matiz que no acabo de pillar, pero es una excusa como la de la chica que admira a Bisbal. Sí, señora Posadas, somos feminista, porque todavía hacemos falta por cosas como la que cuenta usted en ese mismo artículo, que, dicho sea de paso, es muy bueno. Y no pida disculpas por ello. Que todas esas que piden cosas absurdas para las mujeres por encima de los derechos de los varones no son feministas, sólo son unas subnormales.

Pero para indignarme con situaciones machistas de la vida cotidiana que a todos nos pasan inadvertidas, me queda aún blog y más blog. Ya vereis qué fuerte es nuestro lavado de cerebro general. Nosotros, que nos creemos tan libres.